"ES ESTE UN SENCILLO BLOG DESDE EL CUÁL DESEO COMUNICAR Y COMPARTIR CON AMIGOS Y AMIGAS, REFLEXIONES, EXPERIENCIAS SOBRE NUESTRO ACONTECER Y SOBRE EL SERVICIO MISIONERO DE LA IGLESIA..." Benvenuti!

martes, julio 17, 2007

VALORES PARA RECONSTRUIR EN NUESTRA PATRIA

El pasado 5 de julio se realizó en todo el País y realizaron también muchos colombianos residentes en el exterior, una gran MARCHA contra el secuestro y a favor de la VIDA. Ya se acerca el 20 de julio, día en que todos los colombianos recordamos nuestro “GRITO DE INDEPENDENCIA”, cumplido hace ya casi doscientos años, el 20 de julio de 1810.

Es importante que meditemos, a partir de la misma PALABRA DE DIOS, sobre PODEROSO SENTIDO que deben tener estos acontecimientos, expresión de nuestra fe y nuestro auténtico patriotismo. La DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA, es sencillamente la aplicación del Evangelio a las circunstancias sociales muy concretas en las cuales estamos viviendo nuestra vida social. Y desde allí debemos insistir en tres realidades que, en nuestro caso concreto: COLOMBIA, se hacen particularmente urgentes:

El valor de la vida: mucho hemos escuchado en estos días palabras de Jesús como estas: “Yo he venido para que ustedes tengan vida y la tengan en abundancia “(Juan 10,10). “Yo soy el camino, la verdad y la vida” (Juan 14,6). Se trata de la misma VIDA que ya tenemos: y esta ha de ser respetada, apoyada, valorada, desde sus primeras manifestaciones en el seno materno, hasta su consumación por la enfermedad o la muerte. De aquí nace el rechazo por el aborto, la eutanasia, el asesinato, u otras formas de atentados contra la VIDA como son por ejemplo, el secuestro y el mismo desplazamiento forzado. De ahí nacen los reclamos que se han de hacer para promover la “CALIDAD DE VIDA” en cada colombiano.

El valor de la libertad: esta ha de ser la condición normal para que una persona pueda REALIZARSE personal y socialmente. En la Sagrada Biblia se nos dice que “Cristo nos ha liberado para ser libres: manténgase firmes y no se dejen atrapar de nuevo en el yugo de la esclavitud” (Gálatas 5,1). Este Capítulo 5 de la Carta de San Pablo a los Gálatas nos permite distinguir muy bien, una libertad auténtica de un perjudicial libertinaje en el que tenemos el riesgo de caer todos nosotros. No se ha respetado la LIBERTAD cuando se ha secuestrado una persona, cuando se le ha obligado a salir de su propia casa y se le ha privado del uso de sus propios recursos para trabajar y vivir bien.

El valor de la paz: la paz es don de Dios. Es el anuncio mesiánico que se escucha en tiempos de Navidad: “Paz a los hombres porque Dios los ama” (Lucas 2, 14). Es la gran promesa de Jesús ya cuando se despide de sus apóstoles en el contexto de la última cena. “La paz les dejo, les doy mi paz, y no como la da el mundo” (Juan 14,27). Es la tarea que encomienda a los doce cuando los envía en su primera misión: “Al entrar en la casa, salúdenla invocando la paz”(Mateo 10, 12). Es la tarea que debemos seguir haciendo porque también hoy debemos ser apóstoles de la VIDA, la LIBERTAD y la PAZ.

Pidamos al BUEN PADRE DIOS y SEÑOR DE LA VIDA para Colombia, para nuestros hijos, estos tres dones: VIDA, LIBERTAD, PAZ. Este ha de ser nuestro auténtico ESCENARIO EXISTENCIAL Y NUESTRO NUEVO GRITO DE INDEPENDENCIA.