VIVIENDO A PLENITUD ESTE OCTUBRE MISIONERO

A evangelizar a los pobres nos envía el Señor

Les propongo que para finalizar este mes de las Misiones, lideremos algunas de estas intervenciones por la evangelización, las misiones, las vocaciones y la práctica de lo que hemos conocido y se nos ha dado.

1º.-Rezar por las misiones y los misioneros. La oración es la principal forma de cooperación espiritual con las misiones. El esfuerzo que realizan miles de misioneros y misioneras alrededor de todo el mundo, poco fruto podría dar si no estuviera apoyado por la oración de otros tantos y tantas que rezan y oran porcada persona, situación y realidad. Una forma concreta de Oración es el Rosario Misionero. Ver una película a manera de cine foro: Vida de Mahatmma Ghandi, Vida del Padre Damián, Vida de San Fco. Javier. Vida de Juan Pablo II. Vida de Juan XXIII y establecer con los chicos compromisos concretos que pueden desarrollar en el colegio, barrio, vereda, parroquia, etc.

2º.-Ofreciendo sacrificios por las misiones y los misioneros. El sacrificio ofrecido por amor, se une al sacrificio de la cruz de Cristo y tiene también un sentido salvador, de inmenso valor para la extensión del Reino de Dios. El sacrificio puede consistir en: abrir una alcancía y a mediados de noviembre abrirla y con ello poder ayudar a una familia de bajos recursos, pagarle la pensión a un joven del colegio, establecer comunicación con una misión colombiana y apoyar una obra, ejem: -Guainia, Vaupés, etc- Que los chicos y chicas se priven de algo que les guste, y ofrezcan lo que más les cuesta; socializar la experiencia en una eucaristía juvenil.

3º.-Catequesis previa a las celebraciones eucarísticas con estos temas u otros de interés colectivo o institucional:
• ¿Por qué octubre es el mes misionero?
• ¿Por qué se celebra en todo el mundo?
• ¿Por qué estamos llamados a ser misioneros y misioneras?
• ¿Cómo podemos ser misioneros a través de la cooperación misionera espiritual y material?

Plantearle a los jóvenes, la inquietud Vocacional Misionera Ad Gentes.

4º.-Estudiando y creando. Desarrollar y trabajar en comunidad el Mensaje para la Jornada Mundial de las Misiones, del Papa Benedicto XVI. Elaborar una guía de preguntas que ayuden a su lectura y profundización. Hacer carteleras, trabajarlas con padres de familia y comunidad educativa.

5º.-Celebrar los jueves vocacionales ante el Santísimo Sacramento, incremeentnado la oración y compartiendo vivencias misionales desde las hermanas, los sacerdotes de la región o misioneros laicos que realizan tareas loables. Buscar misiones en Colombia y fuera de colombia, establecer comunicación: jóvenes - misioneros y compartir inquietudes y proyectos.

6º.-Escribir. Comprometer a los niños de la comunidad, para que escriban y recen cada día una oración misionera por las misiones del mundo entero. Por las vocaciones sacerdotales, religiosas, misioneras y laicales.

7º.-Oración Misionera. Organizar una Jornada de oración misionera en cada parroquia, para destacar la importancia del Santísimo Sacramento, la Palabra y testimonios de Misioneros y Misioneras desde una proyección con Video Bean, etc. Y finalizar los eventos con momentos de oración: alabanza, rosario, adoración, vía crucis.

8º.-Orar por acciones concretas. Por las Obras Misionales Pontificias, e informar a la comunidad cuáles son estas Obras, y a qué se dedican (objetivos de las mismas).

9º.-Celebración de la Eucaristía. Con niños abandonados, los hay en cada lugar y ciudad, jóvenes problema, parejas en crisis animándolos a vivir y experiemntar la experiencia misionera.

10º.-Orar por las intenciones del Papa para el mes de octubre.

Temas sugeridos:

El sacrificio: durante esta semana ofreceremos nuestro sacrificio en oraciones y muestras de desprendimiento personal. El sacrificio también se muestra en las pequeñas cosas, a ejemplo tenemos a los niños, niñas y adolescentes de la Infancia Misionera.
Propuestas para vivirlas en nuestras comunidades:
• Proponer a nuestras comunidades el ofrecimiento de algún sacrificio unido a la oración por la misión universal de toda la Iglesia y por los misioneros.
• Dar a conocer la Unión de Enfermos y Ancianos Misioneros a los enfermos y ancianos de la comunidad, para que también ellos puedan se misioneros desde el ofrecimiento de su enfermedad y limitaciones.

La vocación: resaltar el llamado que Dios hace a todos los cristianos para que su evangelio sea conocido en todas partes del mundo y del universo.
Sugerencias para esta semana:
• Trabajar en los grupos de Jóvenes y de Niños, con oración - formación. Incentivarlos para que visiten a los hogares humildes y sencillos de la ciudad, misionando, llevando el mensaje de Jesús.
• Promover misiones casa por casa, llevando la imagen de la Virgen, dejándola algunos días, (para que hagan una novena, una oración, una celebración con velitas y comppromisos concretos), brindar oraciones, material oportuno. Que se anoten en un cuaderno, intenciones o gracias recibidas de la familia. Luego, que se acompañe el traslado de la imagen hasta la próxima casa.
• Conocer y tomar contacto, a través de las misiones casa por casa, las diferentes necesidades espirituales, falta de sacramentos, casos de enfermedades, necesidad de oraciones y comunicárselas al párroco.
• Elaborar mensajes, con citas bíblicas, para que repartan los niños casa por casa, durante todo el mes misionero.
• Pensar en lugares alejados, prohibidos y en cuestión, o donde no hay capillas para promover la misión a través de la predicación con la Palabra de Dios; optando de manera particular por los geriátricos, asilos, hogares de ancianos. Llevar allí el amor de Dios.
• Proponer una reflexión personal o grupal sobre lo que implica ser apóstol de Jesús hoy.
• Profundizar en la vida de Santa Teresita del Niño Jesús o de San Francisco Javier con la metodología de la Escuela con Jesús. Hay una Santa muy joven y simpatica, vida que se puede socializar: La nueva "venerable" CHIARA LUCE BADANO. Nació en Sassello, Liguria, el 29 de octubre de 1971. Su nacimiento llenó de alegría a sus padres, Ruggero Badano, camionero, y María Teresa Caviglia, obrera, quienes por once años esperaron tener un hijo. "Si bien en medio de una inmensa alegría, comprendimos enseguida que no era sólo nuestra hija sino que ante todo era hija de Dios", señaló su madre según la biografía publicada por los Focolares. Desde muy pequeña, Chiara mostró un profundo amor por Dios, al tiempo que revelaba un carácter fuerte pero dócil, era alegre, bondadosa y muy activa. A los nueve años de edad ingresó al Movimiento de los Focolares. En 1985 se mudó a Savona para seguir los estudios de bachillerato donde, según sus biógrafos, "a decir la verdad, encontró algunas dificultades, a pesar del esfuerzo. No aprueba el cuarto año y esto la hace sufrir mucho".

Chiara tenía muchos amigos, se convirtió en una gran deportista, practicaba tenis, natación, montaña. Soñaba con ser aeromoza y disfrutaba del baile y el canto. Sin embargo, a los 16 años discernió su vocación y decidió consagrarse a Dios. Mantuvo una relación muy cercana con la fundadora de los Focolares, Chiara Lubich, quien le puso el sobrenombre de "Luce". Poco tiempo después le diagnosticaron un tumor en el hombro. El diagnóstico fue "sarcoma ostiogénico con metástasis", uno de los tumores más graves y dolorosos. Chiara se propuso superar la enfermedad y comenzó un intenso tratamiento de quimioterapia, mientras trataba de seguir con su vida habitual sin perder nunca la alegría ni la fe. Preparando su "fiesta de bodas" Entregó todos sus ahorros a un amigo que partió en misión humanitaria a África. A pesar de los esfuerzos de los médicos, la enfermedad avanzaba rápidamente y perdió el uso de las piernas. "Si tuviera que elegir entre caminar o ir al paraíso, elegiría esta última posibilidad", dijo a sus familiares, ya no pedía curarse, sino encontrarse con Jesús. Su fuerza conmovía a sus seres queridos y los médicos que la atendían.

En julio de 1989 sufrió una severa hemorragia y parecía que el desenlace llegaría en cualquier momento. Dijo a sus padres: "No derramen lágrimas por mí. Yo voy donde Jesús. En mi funeral no quiero gente que llore, sino que cante fuerte". En su lecho de enferma, Chiara rezaba mucho pidiendo ser capaz de cumplir con la voluntad de Dios. "No le pido a Jesús que me venga a buscar para llevarme al paraíso; no quisiera darle la impresión que no quiero sufrir más", decía y decidió preparar con su madre la que llamaba "fiesta de bodas", es decir su funeral. Dio a su madre instrucciones muy precisas sobre cómo debía ser su vestido, la música, las flores, los cantos y las lecturas. Le pidió a su madre que mientras preparase su cuerpo se repitiera a sí misma: "Ahora Chiara Luce ve a Jesús".

En beneficio de toda la Iglesia, el domingo 7 de octubre de 1990 Chiara falleció acompañada de sus padres. Tras la puerta de la habitación aguardaban sus amigos. Sus últimas palabras fueron para su mamá: "Chao. Sé feliz porque yo lo soy". Unas dos mil personas asistieron a su funeral. El entonces Obispo de Acqui, Mons. Livio Maritano, inició el proceso de beatificación de Chiara en 1999. El Prelado asegura que tomó esta decisión por "su forma de vivir, especialmente el ejemplo extraordinario que ofreció en el último tramo de su vida". "La vi varias veces durante su enfermedad y me han llegado muchos testimonios de personas que la visitaban en el hospital o en la casa. Y todos confirmaban su altura espiritual y su amor a Dios, que le daban la fuerza para afrontar la prueba con una serenidad que la llevaba a animar a todos los que iban a visitarla con la intención de consolarla", indicó. "He comprobado que la presentación del testimonio cristiano de Clara constituía un mensaje muy fuerte, una forma de evangelización, por lo que me preguntaba si era justo mantener escondida en una pequeña diócesis un tesoro tan grande como para ponerlo al alcance de toda la Iglesia. Por eso no tuve ninguna duda en decidir promover esta causa".

OTRAS ACCIONES:

1... Realizar un envío misionero a toda la comunidad.
2... Reflexionar sobre la Misión Continental en el contexto del octubre misionero.

Un abrazo y HASTA LA PRÓXIMA.